El pasado 28 de abril con el apagón volvimos a recordar la importancia de la electricidad en nuestra vida diaria. Pero pese a todo, siendo una gran desconocida. Quizá por eso existen tantos mitos y creencias populares sobre su funcionamiento, seguridad o consumo. Algunos nacen de la desinformación, otros de experiencias malinterpretadas, y otros tantos porque se han transmitido sin una base técnica real.
Lo cierto es que creer en estos mitos puede poner en riesgo tanto la seguridad de una instalación como tu bolsillo.
En Grupo Jarama, como especialistas en suministros eléctricos y ferretería, vamos a informarte con criterio técnico para que puedas prevenir errores.
El objetivo de este artículo es ayudarte a tomar decisiones más seguras y eficientes desmontando algunos mitos eléctricos comunes.
¡Sigue leyendo que empezamos!
Este es uno de los mitos eléctricos más extendidos, y también uno de los más costosos. Muchos dispositivos siguen consumiendo energía aunque estén, en apariencia, apagados. En realidad permanecen en modo standby o en espera y sí existe consumo.
Este fenómeno se conoce como consumo fantasma, y puede representar entre el 7% y el 10% del consumo eléctrico anual de una vivienda, según diversos estudios (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía y estudios como los de la OCU o WWF España).
Este mito parte de una verdad mal entendida. Los enchufes múltiples o regletas no son peligrosos por sí mismos, siempre que se utilicen de forma correcta y dentro de los límites establecidos por el fabricante.
Lo que puede generar un riesgo es el uso indebido, la sobrecarga o el empleo de productos de baja calidad sin protección incorporada.
Una regleta o ladrón es segura si:
Cada regleta tiene una potencia máxima admisible, que suele oscilar entre 2.300 W y 3.500 W. Conectar aparatos de alto consumo (como calefactores, hornos, microondas o secadores) en una misma regleta puede provocar sobrecalentamiento, dañar la instalación o incluso causar incendios.
Ejemplo:
Una regleta de 3.500 W puede soportar:
Pero si se añaden un radiador eléctrico (2.000 W) y un microondas (1.000 W), se superaría la carga máxima y el riesgo sería real.
Aunque pueda parecer que un cable más grueso es sinónimo de mayor seguridad, lo importante no es el tamaño visual, sino el calibre adecuado según el uso y la instalación.
El dimensionado correcto del cable depende de varios factores: la potencia a transportar, la distancia de la instalación y el tipo de uso (doméstico, industrial, enterrado, etc.). Utilizar un cable sobredimensionado puede ser innecesario y costoso, pero usar uno insuficiente es aún peor.
Una instalación con cables mal calculados puede provocar caídas de tensión, sobrecalentamiento o riesgo de incendio.
Por eso, siempre conviene elegir el tipo y sección de cable en función de una evaluación técnica. En Grupo Jarama te podemos asesoramos para que elijas el cable justo, seguro y conforme a normativa.
Este mito es muy común y puede llevar a una mala gestión energética en el hogar o negocio. Aunque es cierto que la potencia contratada no afecta al consumo de energía (kWh), sí tiene un impacto claro en tu factura eléctrica y en la eficiencia general de la instalación.
La potencia contratada se paga en el término fijo de tu factura, independientemente de si consumes mucho o poco. Si contratas más de lo necesario, estarás pagando de más cada mes, aunque no uses esa capacidad.
Por ejemplo:
Ese coste se repite mes a mes, consumas o no electricidad.
Eso sí, si contratas menos de lo necesario tendrás cortes de suministro cuando uses varios aparatos a la vez. Esto puede afectar a la comodidad y provocar daños en equipos si el sistema eléctrico no está bien equilibrado.
¿Qué te recomendamos?
Realizar un cálculo realista de la potencia necesaria, teniendo en cuenta:
El diferencial es un elemento clave de seguridad, pero no protege de todos los riesgos eléctricos. Su función principal es detectar fugas de corriente y proteger a las personas frente a descargas, pero no actúa frente a sobrecargas o cortocircuitos.
Para una instalación segura, el diferencial debe ir acompañado de magnetotérmicos, que protegen los cables y aparatos, y de protectores contra sobretensiones, sobre todo en zonas con tormentas o picos de red.
Como conclusión, ahora que tenemos claro estos mitos podemos evitar errores comunes, y mejorar la seguridad y eficiencia energética en el hogar y en nuestros entornos profesionales.
En Grupo Jarama te ofrecemos material eléctrico certificado y el asesoramiento técnico que necesitas para cada instalación.
Visítanos o consulta nuestro catálogo online y equípate con total confianza para una instalación eléctrica segura.
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